Passa al contingut principal

EL NAZISMO NO ES SOCIALISMO

EL NAZISMO NO FUE SOCIALISMO
Por CríticaPolítica
Existe el mantra liberal de que el nazismo fue una forma de socialismo. Es uno de los ataques más habituales que recibe el socialismo desde las filas liberales. Los argumentos son muy sencillos (y, como veremos, incorrectos). Por un lado, los liberales argumentan que el partido nazi se llamaba Partido Nacional Socialista Obrero Alemán. Además, Hitler habría hablado diversas veces sobre su ideología socialista y anticapitalista. Por otro lado, argumentan que la política económica nazi fue efectivamente socialista: intervención estatal, control de precios, gasto público, control de sectores económicos (como el militar), subvenciones estatales a personas con dificultades económicas, etc. Este doble argumento basado en el nombre del partido y la supuesta ideología anticapitalista de Hitler, y supuestamente aplicada a partir de 1933, fue rebatido de manera incontestable en este artículo de Bitácora de Octubre (también lo hizo con el fascismo italiano en este otro artículo). Sin embargo, en nuestro espacio ofreceremos otros apuntes para complementar ese artículo.

En primer lugar, hay que dejar claro qué es el socialismo: es un sistema económico en el cual se socializan los medios de producción (tierras, industrias, servicios, etc) y la economía se planifica desde el estado.
Es decir, en un estado socialista no existe la propiedad privada de los medios de producción. Como máximo, en algunos estados se permitieron algunas formas de propiedad cooperativa (como los koljoses en la URSS).

Pero el nazismo no cumplía ninguna de estas dos premisas:

Privatizaciones. El estado nazi no sólo no socializó los medios de producción, sino que, según este estudio de Germà Bel, llevó a cabo una privatización masiva de empresas estatales en multitud de sectores: ferrocarriles, minería y acero, la banca, construcción de barcos, espacios municipales, etc. Muchas de las mayores empresas públicas alemanas pasaron a manos privadas. Esta política económica es, a todas luces, totalmente antisocialista. Pero los nazis fueron aún más allá: privatizaron incluso los servicios sociales. Por otro lado, el aumento del gasto social para los más pobres durante el nazismo es un mito: la República de Weimar ya ofrecía los mismos servicios sociales que ofreció la Alemania Nazi y, de hecho, el estado nazi no incrementó el presupuesto destinado al Auxilio de Invierno. La mayor parte del gasto público nazi fue a parar a la industria militar, no a políticas sociales.
Por último, cabe señalar que la desigualdad de ingresos y riqueza se acentuó durante el nazismo, tal y como se demuestra en este estudio de Sweezy. Los impuestos fueron más benevolentes con los propietarios de los medios de producción que con los trabajadores: "The share of total tax revenue
contributed by the properties group had grown
by one per cent in I937-38, while labor's bur-
den had increased 3.4 per cent".

Libertad económica. En este estudio de Buchheim y Scherner se afirma claramente que las empresas privadas tenían una libertad económica casi total a la hora de decidir sobre la producción y la contratación de personal. "The foregoing analysis again proves that in the Nazi period enterprises continued to shape their actions according to their expectations and that the state authorities not only tolerated this behavior, but bowed to it by adapting their contract offers to the wishes of industry". No es extraño que algunas de las grandes empresas del momento (Siemens, IBM, etc) colaborasen con el régimen nazi y sacasen amplis beneficios.  Algunas incluso se beneficiaron de los campos de concentración.

Es curioso que se califique la Alemania Nazi de "socialista" pero no a la actual Noruega. En el país nórdico, el estado tiene nacionalizados varios sectores económicos estratégicos: el petróleo, el gas natural, el aluminio, las telecomunicaciones, etc. El estado desempeña un enorme gasto público, el cual, en 2018, fue del 48,7%), gran parte destinado a la seguridad social: el estado cubre la sanidad, pensiones de vejez, bajas de maternidad y paternidad, bajas por enfermedad, desempleo, dependencia, recursos mínimos, etc).

Vemos que todo lo que los liberales resaltan de la Alemania Nazi para calificarla de "socialista", lo tiene la actual Noruega (y además en mayor medida). Sin embargo, al pais escandinavo no dudan en calificarlo de capitalista (que lo es, pero no es liberal).

En EEUU, durante la Gran Depresión, el presidente Roosevelt desarrolló el New Deal, un programa de reformas económicas e intervención estatal que incluía prestaciones sociales a los más desfavorecidos, control de precios sobre varios productos y la construcción de obras públicas para dar empleo desde el estado. ¿Fue socialista EEUU?

La Alemania Nazi fue un estado capitalista. La intervención del estado por parte del gobierno nazi no fue muy distinta del que se desarrolló en otros países capitalistas para luchar contra la recesión económica que conllevó la Gran Depresión. Mantuvo el derecho a la propiedad privada de los medios de producción. Privatizó a gran escala. Favoreció a grandes empresas y respetó la libertad económica. Todo contrario a lo que sucedía en la URSS y a lo que sucedería en los países comunistas del Este entre 1947 y 1991.
No, el nazismo no fue socialismo.

Comentaris

Entrades populars d'aquest blog

SOCIALISMO EN ÁFRICA: LA REPÚBLICA POPULAR DE CONGO (BRAZZAVILLE)

SOCIALISMO EN ÁFRICA: LA REPÚBLICA POPULAR DE CONGO Por CríticaPolítica Que el socialismo es capaz de crear grandes tasas de crecimiento y una riqueza notable ya lo vimos en otro artículo . Hoy analizaremos un caso muy particular: la era socialista (1970-1991) de la actual República del Congo (o Congo-Brazzaville, no confundir con la vecina República Democrática del Congo, o Congo-Kinsasha). A partir de 1961, un gobierno socialista tomó el poder en Congo-Brazzaville, y en 1969-70 un nuevo gobierno convirtió el país en un estado socialista" aplicando los principios del marxismo-leninismo y manteniendo estrechas relaciones con la Unión Soviética y Cuba. Era un pequeño país con pocos recursos naturales y que arrastraba los típicos problemas de una cruel época colonial: monocultivos que satisfacían los intereses de su antigua metrópoli (Bélgica) y no los nacionales, y diversos conflictos étnicos. Según expone Margaret Sanders en su estudio Measurement of Levels of Living in

SOCIALISMO Y ALIMENTACIÓN

SOCIALISMO Y ALIMENTACIÓN Por CríticaPolítica La necesidad básica principal de todo ser humano es alimentarse. Desde la caída del comunismo en 1991, en los países capitalistas se nos ha metido en la cabeza que el socialismo era miseria, y que en las repúblicas socialistas (tanto las soviéticas, las yugoslavas, como las del resto del Bloque del Este) se pasaba hambre. Es una acusación que ya se ha hecho arquetípica, y evidentemente tiene el objetivo de alejar a las masas de la ideología comunista, especialmente en estos tiempos en los que el liberalismo se está poniendo en entredicho. Vamos a demostrar que es falso, igual que en otro artículo demostramos la falsedad del mantra según el cual el socialismo implica estancamiento del crecimiento y ausencia de riqueza. En los ex repúblicas socialistas no sólo no se pasaba hambre, sino que el nivel de alimentación medio estaba por encima del mínimo indispensable. Pero antes, un comentario acerca de los datos. El portal Our World

NORUEGA. ESTATISMO INTERVENCIONISTA

NORUEGA. ESTATISMO INTERVENCIONISTA.  Por CríticaPolítica Noruega es el país del mundo con mayor nivel de vida y mayor PIB per cápita, que convive con una baja desigualdad y una pobreza bajo mínimos. En efecto, su índice de Gini es de 0,27 (Banco Mundial, 2017) y su pobreza relativa sólo del 7,5% (Burgen Project, 2018). La pobreza en algunos países liberales es vergonzosa teniendo en cuenta sus PIBs per cápita. Por ejemplo, en Singapur, según este informe , la pobreza absoluta es del 12%, y la relativa del 26%. En Hong Kong, según su propio gobierno , la pobreza llega casi al 15%. Nada raro, teniendo en cuenta la inmensa desigualdad que hay: el índice de Gini de Singapur es de 0,38 (Statista 2020); el de Hong Kong, de 0,54 (HK Social Indicators, 2016).   El nivel del PIB per cápita noruego supera al de los países más liberales del mundo: El objetivo de este artículo es mostrar que las economías estatistas, es decir, que se encuentran fuertemente intervenidas por un estado enorme (el cu